Con el debido respeto

Mal día para ir al cine. Más de 4000 salas de todas España cierran hoy sus puertas en protesta por la nueva y polémica ley del cine. No me parece una medida muy acertada, pero es comprensible el enfado de la Federación de Cines de España. El motivo de su enfado: La nueva y muy mejorable ley del cine que impone a las salas proyectar una cuota de cine español (la proporción sería de una española por cada tres americanas). Si bien se puede argumentar que es una medida para potenciar nuestro (lamentable, en general) cine, se entiende que los empresarios, que son eso, empresarios, no estén de acuerdo con esta ley porque les supondría una gran pérdida económica. Y es que no nos engañemos, el cine español no interesa. Lo dicen los estudios, lo dicen las encuestas, y lo más importante, lo dice la taquilla. Así que es hora de dejar de mirar para otro lado, dejar de echar la culpa a los cines o los ciudadanos por no ir a ver cine español, y empezar a preguntarse quién es el verdadero culpable de tan mediocre cine patrio.