lunes, 30 de noviembre de 2009

UE y Aminatu Haidar

Con motivo del Festival Internacional de Cine de Gijón y al escribir sobre este tema, estos días no he opinado sobre otras cosas, por eso me gustaría hacer un "post resumen" de algunos asuntos que han ido apareciendo en los medios y que me merecen alguna reflexión. En esta entrada comentaré algo de la UE y de la situación de Haidar y el Sahara.

En primer lugar la designación de las personas que ocuparán a partir del 1 de enero los nuevos cargos eurocomunitarios tras la entrada en vigor del Tratado de Lisboa. Así tenemos que los dos cargos más importantes en la nueva configuración europea, van a ser dos figuras y dos políticos con menos peso que el ala de una mosca. El señor Van Rompuy será el Presidente de la UE ni más ni menos. Traducido quiere decir que será Presidente de la Nada. O si se quiere Presidente de un algo todavía sin definir, con una política sin determinar y con unas funciones consistentes sobre suelos de humo. La Alta Representante de la UE para la Política Europea será Catherine Ashtor. Británica. Es decir, que la persona que dirigirá la diplomacia europea será una señora que pertenece al país más euroescéptico de toda la CEE, y que, si todo va como parece y gana David Cameron las próximas elecciones en el Reino Unido, mantendrá una política más hostil hacia la UE. Resumiendo. Con el Tratado de Lisboa se pretendía dar a la UE un aire más independiente y que fuera algo más que un conjunto de países que se reunía cada cuatro meses. Pues no se ha conseguido. El Presidente ha sido puesto por Francia y Alemania y la Alta Representante es un pago al Reino Unido por unos favores nunca prestados y que su único bagaje es el de ser socialista y mujer.

Otro asunto que colea estos días es el de la situación de Aminatu Haidar, activista saharaui en huelga de hambre porque no puede regresar a su país tras la expulsión de Marruecos y la inacción de España. La situación del pueblo saharaui siempre me interesó, como se ha dejado patente en otras ocasiones en este blog, porque me parece que con esa pobre gente se ha cometido una de las mayores injusticias y atrocidades de la historia, y el asunto de Haidar es uno más de tantos. Desde nuestra salida del Sahara, a prisa y corriendo, huyendo porque las minas de fosfato ya no eran rentables, y porque los marroquíes, conscientes de que Franco estaba a punto de espicharla, iniciaron la marcha Heineken (también conocida como la marcha verde), ocuparon unos territorios que por legitimidad le correspondían a los saharauis. No a España o a Marruecos, al pueblo saharaui. Pues bien, tras más de 30 años de dominio alauita, de tener que marcharse de sus tierras a campos de refugiados de Tinduf (en Argelia), de un pasotismo extremo de todos los gobiernos españoles en estos años, tenemos la historia de Aminatu Haidar y ahora todos nos llevamos las manos a la cabeza y nos volvemos muy solidarios con el Sahara y muy críticos con España (aunque nuestro país le ha ofrecido alternativas y ella ha dicho que no a todas), y que hay que ver que pobre mujer y qué va a ser de ella. Pues claro que pobre mujer, y pobre saharauis que sin comerlo ni beberlo llevan más de seis lustros sufriendo un castigo y unas injusticias que hasta ahora han interesado muy poquito entre la opinión pública.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (IX)

Se acaba de conocer el palmarés de la 47ª edición del Festival Internacional de Cine de Gijón y para ser sinceros, estoy algo decepcionado. Salvo el premio del Jurado Joven que ha votado por Welcome (y que parece ser que siempre es el que tiene más criterio viendo las películas que han votado otros años) el resto de galardones me han dejado un poco frío. No entiendo el premio a Mejor Director para Lynn Shelton, por Humpday o el de Mejor Actor para los actores de esta cinta, que parece que sí o sí tenía que salir premiada ya que lo fue en Sundance. Aquí dejo el palmarés de esta edición.

Premio Principado de Asturias al Mejor Largometraje: La Pivellina, de Tizza Covi y Rainer Frimmel.
Premio Mejor Director: Lynn Shelton, por Humpday.
Premio Mejor Actor: Mark Duplass y Joshua Leonard, por Humpday.
Premio Mejor Actriz: Patrizia Gerardi, por La Pivellina.
Premio Mejor Guión: Philippe Lioret, por Welcome.
Premio Mejor Dirección Artística: Mal día para la pesca, Álvaro Brechner.
Premio Especial del Jurado: Le Roi de l´evasion, de Alain Giraudie.
Premio Jurado Joven: Welcome, de Philippe Lioret.
Premio Fipresci, de la crítica internacional: Francesca, de Bobby Paunescu.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (VIII)

Esto llega a su fin. Ha terminado el Festival. Ya solo queda conocer mañana qué películas se alzarán con los premios más importantes del jurado. Y curiosamente las dos películas de hoy tienen serias opciones. The Good Heart me ha encantado. Tampoco era muy difícil conseguirlo porque sus dos actores protagonistas me encantan: Brian Cox, y en especial Paul Dano. El personaje de Cox es un cascarrabias, un personaje odiable y odioso. Se encuentra en hospital tras sufrir un infarto de corazón. Allí conoce a un joven que vive en una caja de cartón y que ha fallado al intentar suicidarse. Por azares del destino entablan una buena relación y el viejo le deja encargado de su bar, un local con peregrinas normas como que no deja entrar a las mujeres... Hasta que un día entra una joven en apuros. Por otro lado la holandesa Los últimos días de Emma Blank, que cuenta la historia de una chica caprichosa que supuestamente está en las últimas y que por ello se dedica a maltratar con peticiones estrafalarias al servicio.

En definitiva, que visto lo visto, esta edición, como ya nos tiene acostumbrados este certamen, ha sido espléndida. Salvo alguna película bastante rarita y que no hay por donde cogerla, el nivel medio ha sido notable. Y los ciclos dedicados a Balabanov o Fatih Akin han sido estupendos. Por cierto, anoche la policía tuvo que sacar del mar al director ruso, que decidió darse un baño en la playa a las dos de la mañana y con marea alta. Pero volviendo a lo interesante, si de mi dependiera los tres premios del jurado, mi elección sería más o menos la siguiente: Welcome, de Philippe Lioret; Mal día para pescar, de Álvaro Brechner; y The Good Heart, de Dagur Kari. Pero en esto siempre hay sorpresas y cintas como Wakaranai o Le Roi de l´evasion pues también tiene su chance. Habrá que esperar a mañana.

Yo por mi parte ya vuelvo a Madrid. Fantásticos estos días en Gijón, como siempre. Ciudad estupenda, llena de gente estupenda y con un Festival a la altura de los mejores, y en su género, sin duda el mejor. Ojalá podamos volver en un futuro y volver a disfrutar de la oportunidad de asistir a este certamen, que para mí es muy especial y al que le tengo un cariño inmenso. Dar las gracias a la organización, a Pablo, Marta, Juan Luis, a las chicas acomodadoras en las salas, al personal que acredita, a los proyeccionistas. En definitiva a todos los que hacen posible que año tras año este Festival tenga más repercusión, acuda más gente y sea más importante en los círculos cinematográficos internacionales.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (VII)

Antepenúltimo día de festival y el cansancio va haciendo mella en todo el mundo. En los que seguimos día a día todas las películas, en el personal organizador y se podría decir que hasta en las películas. Bueno lo primero que he de contar es que he podido conocer al director ruso Aleksei Balabanov, el Tarantino del Este le dicen, y todo lo que tiene de buen director lo tiene de parco en palabras, todo lo contrario a Fatih Akin. Pero dejando esto a un lado, he de hacer dos apuntes, uno bueno y otro malo. El malo no es culpa del Festival, pero le ha quitado "glamour". El Teatro Jovellanos, buque insignia año tras año de este certamen a pesar de sus lamentables butacas, este año está en obras y no se ha podido proyectar nada en este magnífico lugar. El teatro de la Laboral no está mal, pero demasiado lejos del centro y parece que queda un poco a desmano. El punto bueno es que este año, antes de las películas, no nos ponen cortometrajes. Entiendo que deben tener su espacio para que la gente pueda verlos y valorar quien debe ganar, pero la mayoría de veces eran cortos de media hora, aburridísimos y que hacían que luego cogieras con menos ganas la película.

Por otro lado, las películas de hoy no han estado del todo mal. Waranai, película japonesa, con tintes melodramáticos que narra la vida de un joven que no encuentra trabajo y se encuentra en su vida con multitud de problemas como el abandono de su padre y la enfermedad de su madre. Esto le lleva a tomar una serie de medidas bastante drásticas. Morrer como un homen es una cinta portuguesa que nos cuenta la historia de una travesti ya mayor de edad que ve como las jóvenes le quitan protagonismo en el local donde trabaja. Para colmo recibe la visita de su hijo, un militar que no acepta la condición sexual de su progenitora. Una película bastante notable, que podría parecer sacada de la mente de Cassavettes o Almódovar, pero a la que le sobra metraje. 134 minutos, viendo la media del resto de filmes, parece un metraje excesivo para este tipo de películas. Mañana penúltimo día y dos películas que me apetece mucho ver. Ojalá se cumplan las expectativas.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (VI)

Después de la jornada de transición de ayer en la competición de la Sección Oficial, y tras tragarnos una película del inefable Harmony Korine, hoy ha vuelto lo emocionante. Dos películas pequeñas, sin gran pretensión y que quizás no tengan un gran recorrido, pero entretenidas cada una a su manera. Por un lado Go Get Some Rosemary, que viéndola fríamente pues llegas a la conclusión de que películas así has visto muchas, pero que para pasar un rato agradable, no está mal. La relación de un padre, bastante alocado e irresponsable y el perfecto manual de como no debe ser un progenitor, con sus hijos, a los que solo ve unas semanas al mes tras divorciarse de su mujer. Cinta amena, sin problemas y que si nada cambia ni se tuerce será uno de los tantos films que pasan sin pena ni gloria por un festival de cine.

Algo parecido a lo que sucederá con Pivellina, hermosa película pero que le falta algo más para acabar de trascender. Quizás me equivoco y al final la historia de una niña abandonada que es encontrada por una familia y que deciden quedársela en lugar de denunciarlo a las autoridades pertinentes consigue algo, pero no tiene pinta. Cinta amable, también entretenida porque no tiene una pretensión mayor, con actores todos amateurs (creo que los protagonistas vienen del mundo del circo) y que viendo las películas que han sido proyectadas y las que quedan todavía por delante, como ya hemos dicho, no parece que vaya a alzarse con ninguno de los premios de este, cada vez más, interesante Festival Internacional de Cine de Gijón.

P.D: Quiero aprovechar para felicitar a un amigo que acaba de ser padre. Un beso para el niño, para la madre y un abrazo enorme para el papá.

lunes, 23 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (V)

De las dos proyecciones de hoy de la Sección Oficial, solo una entraba a concurso. Le Roi de l´evasion es una comedia divertida. Sí, lo sé, parece una redundancia, pero las hay divertidas como es este caso, y las hay que no tienen ni pizca de gracia como la del otro día, Humpday. En esta producción francesa tenemos la historia de un cuarentón gay y tractorista cansado de su monótona vida. Un día, por casualidad salva la vida de una muchachita de 16 con la que establece una curiosa relación, en la que los momentos divertidos se mezclan a la perfección con otros de tinte más dramático. Espero que en unos meses la veamos estrenada en los cines comerciales porque seguro que tiene una buena acogida.

La otra película era Frontier Blues, que no entraba en competición porque según explicó su joven director antes de la proyección, tuvo un problema con la cinta original y se tuvo que proyectar en formato DVD. El director pidió perdón y la película tiene unas imágenes muy bonitas y poderosas de la zona entre Turkmenistán e Irán. Quizás la culpa es mía porque no se parecen en nada en cuanto al argumento, pero todas estas películas me recuerdan a la maravillosa Las Tortugas también vuelan, y ciertamente son inferiores a la cinta de Ghobadi. El martes es jornada de transición en lo que a la competición se refiere, pero siempre hay cositas que ver por ahí.

Festival Internacional de Cine de Gijón (IV)

Este post debería haber aparecido ayer, pero por problemas técnicos no pudo ser, así que entre eso y que tengo prisa porque dentro de diez minutos empieza una proyección, iremos rápido con la jornada de ayer. Se puede resumir en peliculón y en tostón. El tostón es Between Two Worlds, una gilipolladita de esas que cuando sales del cine piensas: "el director me la ha metido hasta el fondo y yo me lo he tragado". Hacia mucho tiempo que no recordaba a tanta gente salirse de un cine a mitad de proyección. Y no me extraña, si no me salí es porque estaba cómodo en la butaca, pero la película invitaba a hacerle un corte de mangas e irse. La cosa va de un tío que aterriza en un mundo que le es desconocido... Paso de resumirla que me como el tiempo que me queda. Pero vamos, partiendo de esa idea, pues un soporífero coñazo ambientado en Sri Lanka.

Por otro lado se proyectó la que para mí, de momento, debería ser la ganadora: Welcome. Muy bien dirigida, con un argumento sólido y entretenido, con una elección de actores notable, Philippe Lioret nos cuenta la historia de Bilal, que como tantos muchachos inmigrantes, llega a Calais con la esperanza de cruzar al Reino Unido, en este caso para encontrarse con una chica. La burocracia le impide realizar el viaje, por lo que decide tomar clases de natación y así cruzar hasta las Islas, y es ahí donde conoce a Simon (un fabuloso Vincent Lidon) un hombre maduro y en proceso de divorcio, con el que mantiene una relación en la que se percibe el miedo y la represión que sufren los clandestinos y las represalias a los franceses que les ayudan de buena fe. En su porosidad, la película deja traslucir sentimientos como el amor imposible (que no siempre es el ideal), la solidaridad y el racismo. Una película con mayúsculas, lo mejor del festival.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (III)

Sábado pasado por el agua en Gijón. ¡Vaya chupa de agua está cayendo ahora! Pero a pesar de la lluvia no hace frío, o será que yo no lo tengo tras el gin tonic en el Dindurra. El Dindurra es un bar-cafetería típico de gran ciudad donde al entrar se siente algo especial. Se respira historia y el saberte en un lugar que conserva la misma decoración decimonónica a pesar del paso de los años; las mismas mesas donde se desarrollan todo tipo de tertulias como debió ocurrir allá por el siglo XIX, se mantiene la puerta que daba acceso al Teatro Jovellanos desde la cafetería, y por todo el local hay fotos y grabados del transcurso de los años por esa zona. Los precios no son baratos, pero para echar un rato por la tarde, es un lugar muy agradable. Solo poner una pega. Tal y como le he dicho a la simpática camarera, un buen gin-tonic nunca puede tener una rodaja entera de limón dentro del vaso. Un combinado perfecto ha de tener un poquito de piel dentro o restregar limón verde (lima) en el borde, pero nunca una rodaja entera o exprimir zumo dentro del vaso porque entonces la tónica pierde sus burbujas. Ha aceptado el consejo de buen grado.

En lo que al Festival se refiere, día interesante. Ninguna de las dos películas proyectadas en la Sección Oficial me han dejado un sabor de boca especial, pero tampoco me han disgustado. Además tienen el típico aroma de cinta festivalera, y seguro que están en las quinielas de favoritas a ganar algún premio. En primer lugar Mal día para pescar, del uruguayo Álvaro Brechner. La historia de una vieja leyenda de la lucha que vive sus últimos días de gloria compitiendo en combates amañados por la Sudamérica profunda hasta que un día conoce a una mujer que cambiará su futuro. El argumento contado así podría recordar ligeramente a The Wrestler, de Mickey Rourke, pero tiene un toque mucho más esperanzador. Quizás fue por la hora de la proyección o que yo no estaba muy despierto pero se me hizo larga. Aún así, es una historia de perdedores y pícaros, y cuando estas personas son las protagonistas y tienen algo que contar, a mí me tendrán como defensor. Por otro lado Humpday, una especie de comedia, divertida a ratos, donde un hombre casado recibe la visita de su viejo amigo de correrías y al que quiere demostrar que todavía sigue siendo un tipo divertido. Para ello en una noche loca acaban apuntándose para rodar una película porno. La cinta ganó el Premio del Jurado de Sundance, y quizás se llevé algún galardón en esta edición, pero confío que con todo el material que nos queda, haya algo mejor.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón (II)

Primer día en Gijón y me alegra ver que todo sigue más o menos igual. Parece como si uno se reconciliara consigo mismo cuando ve que una ciudad que quiere sigue más o menos igual, y que no hace falta gastarse millonadas en faraónicas obras que solo consiguen tocar las narices de los ciudadanos para ser una ciudad accesible, atractiva y resultona a ojos del autóctono y del turista. Aunque de momento no he podido dar mis habituales paseos por la playa de San Lorenzo o ir al puerto por culpa de un inoportuno dolor en el gemelo,del que espero estar recuperado cuanto antes. También ha sido el primer día de Festival en lo que a la competición por la Sección Oficial se refiere, y sinceramente, las dos películas de hoy, pues ni fú ni fa.

Por una lado una tontadita francesa llamada Les beaux gosses, algo así como un Supersalidos en versión europea, que es donde está el matiz. Para los sesudos críticos y analistas, una será una bobada americana y la otra una cinta que refleja la inseguridad juvenil. En fin, a mí no me ha gustado demasiado, aunque en Francia ha sido la película más vista del año. Con la otra cinta si que me siento algo decepcionado porque esperaba más de ese drama que lleva a una mujer rumana a irse a Italia y compaginar eso con su vida actual. Planos larguísimos que no dicen nada, cámaras fijas que aburren al espectador. Si lo que pretendía era dar sensación de espera, consiguió que el público esperara casi ansioso a que terminara. Parecía algo más esta peli censurada en Italia por sus críticas al país transalpino. Pongo punto y final que ya son las 3.38 de la mañana y es solo el primer día. A ver como llegamos al último.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Festival Internacional de Cine de Gijón 2009 (I)

El estreno de este blog coincide con el comienzo de un evento que a mí particularmente me encanta y al que procuro asistir cada año (siempre que se pueda). Me refiero al Festival de Cine Internacional de Gijón. A mí este certamen me parece de lo mejorcito del panorama independiente mundial. Siempre suele haber alguna película pasada de rosca o algún director con más ganas de hacer ruido que de gustar al público, pero en líneas generales la calidad de las películas es extraordinaria. Y este año tengo la esperanza de que así siga siendo. La sección oficial tiene cintas que me apetece ver y que considero que pueden dar que hablar en los próximos meses no solo en circuitos indies (hay que recordar que películas como C.R.A.Z.Y o Juno estuvieron presentes en este festival). Pero es que además cuenta con una gran variedad de secciones con proyecciones más que interesantes, donde destaca en esta edición el ciclo "This is England" o la retrospectiva que se hace del director Fatih Akin y que es muy apetecible para todo aquel que quiera acercarse a la filmografía del turco. Prometen ser unos días muy entretenidos y desde aquí lo contaremos. Empieza el FICX.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Un cambio necesario y para bien

Era necesario y por eso lo he hecho. O al menos creo que lo era. Todo cambio requiere un proceso de adaptación, y en eso andamos por aquí. Este mes sin escribir en el blog ha servido para pensar y reflexionar que rumbo debía tomar tras unos meses frenéticos con cambios importantísimos, tanto en el ámbito laboral como personal. Debido a esto, el número de post mensuales había caído, el tiempo para elaborarlos era menor y un espacio como este, para seguir "vivo" requiere de empuje, de ideas y de artículos novedosos u opinativos. Y eso, a la hora de ponerme delante del teclado, no lo encontraba. Me faltaba motivación, temas, capacidad de redacción e innovación. El diseño, el modelo de blog estaba agotado, me cansaba y no me estimulaba a escribir. ¿Y qué hacer cuando algo que quieres y que te gusta, por "h" o por "b", deja de entusiasmarte? Pues cambiar, adaptarte a algo nuevo, dar un giro, un cambio, pero en los dos sentidos, primero en lo personal y lo segundo en lo formal. En lo personal creo que está conseguido, en lo formal creo que a partir de ahora sí.

Y es por esto que "Con el debido respeto" se moderniza. Cambia de look. Se hace más intuitivo, más atractivo a la vista, menos abigarrado y más abierto. Con la intención de ser más accesible. Pero no solo estéticamente, también cambia de estilo. Este blog ya no lo firma Corleone. El autor ya no es alguien que se esconde bajo un pseudónimo. Quiero hacerlo todo más personal, donde la opinión, algo que ha sido fundamental en el devenir de este blog, cobre todavía más importancia en el nombre y la imagen del "auténtico" autor. Ni mucho menos se va a perder la ironía, ni el chiste, ni la crítica cuando haya que hacerla ni la alabanza cuando el momento lo requiera. La música, el cine, la literatura, la actualidad en todos sus extremos, seguirán siendo los "leits motiv" de este espacio.

Son varios los cambios, pero creo que son a mejor. Estoy seguro que es el momento adecuado. Después de tres años de experiencia bloguera, había que dar una vuelta de tuerca, un giro que consiguiera adaptarse a nuevos formatos y nuevos temas. Por eso creo que el paso que he dado es el correcto. O quizás no, quizás es un error y dentro de un tiempo me acabo dando cuenta que no es posible mantener esta nueva idea, y que mejor volver a lo viejo y lo cómodo antes que seguir en esta línea. Pero a lo hecho, pecho, y hoy es el momento del cambio. No hay vuelta atrás porque la marcha hacia el frente ha comenzado. Nos leemos de nuevo.