viernes, 26 de junio de 2009

Michael Jackson

Últimamente este blog parece más la sección de esquelas del ABC que un sitio de comentario y opinión pero así vienen las cosas. Acaba de salir la noticia de que esta madrugada ha fallecido Michael Jackson por parada cardiorespiratoria y ya circulan todo tipo de rumores sobre su muerte. A pesar de su innegable talento y aunque me gustaba, nunca me llegó a cautivar. Quizás todo lo que le rodeaba, su surrealitsa vida, su carácter excéntrico y su tontura mental, hicieron que no me sintiera atraido por su figura y su música. Aún así, hoy es un día triste porque más allá de todo el circo que tenía montado a su alrededor y los escándalos que jalonaron su vida, Jackson es un referente indiscutible del pop de los últimos 30 años. Un artista total. Gran intérprete y gran bailarín, que nos dejó temas brillantes. Descanse en paz el Rey del Pop.

sábado, 20 de junio de 2009

Un buen hombre

Muchas veces uno se plantea si verdaderamente el ser humano es una especie racional y que actúa en conciencia. Algunas actitudes del Hombre hacen pensar que somos el ser vivo más peligroso de la Tierra. Somos los únicos que no matamos para comer o como instinto de supervivencia, sino que lo hacemos por gusto. Somos una especie cainita, vengativa, violenta, prepotente y sin respeto por los demás seres. Nos creemos superiores porque desde pequeños nos dicen que nosotros tenemos moral, y que un perro o un pelícano son amorales porque no poseen la capacidad del raciocinio ético. Pero cuando vemos que el ser humano se embarca en algo tan estúpido como son las guerras, cuando vemos que fanáticos terroristas colocan bombas invocando no sé qué religión o no se cuál territorio, cuando vemos la hipocresía imperante en sectores extremistas y ultramontanos, cuando nos creemos en el derecho de invadir espacios que no son nuestros solo por el hecho de pensar que somos superiores a los de nuestra misma raza, cuando matamos a animales por el simple hecho de ir a cazar con el señorito de turno o cuando disfrutamos viendo cómo se mata a un pobre animal entre banderillas y espadas, da que pensar que somos desprecibles. Yo me pregunto, ¿qué pensará otro ser vivo de nosotros? ¿Cómo siendo tan mezquinos seguimos pensando que somos superiores a otras especies?

Pero por suerte para nosotros, en el mundo sí hay hombres buenos. Gente que dedica su vida a la filantropía, que se embarca en maravillosos proyectos humanitarios para ayudar a los que más lo necesitan. Vicente Ferrer es una de esas personas. Cuando llegó a la India en 1952 como misionero jesuíta, la situación de absoluta pobreza que había en Bombay (ahora Mumbay) le causó un gran impacto. Desde entonces decidió que el resto de su vida la tendría ocupada en ayudar a esas personas. En 1970 fue expulsado de la Orden, porque hay una cosa clara, si quieres ayudar a los demás de manera desinteresada, no puedes pertenecer a una congregación y a una religión donde solo importa enriquecerse y tener poder a costa de lo que sea. Pero este hombre, de las más absoluta Nada, construyó pozos, caminos, hospitales, colegios, casas... Y además con la oposición de muchos dirigentes indios que pretendieron echarlo del país, pero que no o consiguieron porque en ese momento Vicente Ferrer era alguien imprescindible para millones de indios. Y digo bien, millones de personas. Este señor no ayudó a una, ni a 10, ni a 100 ni a 1000, ayudó a millones de personas cuyo futuro era la más absoluta de las miserias, pero que gracias a su labor, encontraron un rayo de esperanza.

Y a pesar de su grandeza, era un tipo humilde. En ninguna de sus declaraciones presumía de sus logros, cuando otra gente, por mucho menos, están como locos por dar a conocer sus bobadas. Pero eso va con la personalidad de cada uno, y por eso él siempre decía que lo había abandonado todo para lanzarse al mundo con el corazón encendido. Pues ese corazón encendido se apagó el 18 de junio, pero por suerte miles de personas siguen colaborando con su Fundación para que el legado de Vicente Ferrer no se pierda. Y que los niños de Anantapur puedan seguir yendo al colegio, y los enfermos a hospitales, y pueda haber agua potable para beber y regar campos, y caminos para transitar. La religión hindú es politeísta y ven dioses en cualquier elemento de la naturaleza, pero más allá de eso, para los cientos y cientos de niños, y los cientos de miles de personas a los que ayudó, Vicente Ferrer es un auténtico Dios. Un santo de los de carne y hueso, y con motivos suficientes para considerarlo como tal. Descanse en Paz.

viernes, 19 de junio de 2009

Vicente Ferrer

Ha muerto en la India Vicente Ferrer. Calificarlo de cooperante sería reducir su trayectoria demasiado. Por eso el próximo post será para hablar de su figura largo y tendido. Un tipo de los de verdad, a los que se les puede llamar buenos. Gente como él dignifica a la especie humana, y por gente como él merece la pena creer en el Hombre. Esto señor sí que era un santo terrenal. Descanse en paz don Vicente Ferrer.

sábado, 13 de junio de 2009

Vete y no vuelvas Totó

Alfredo es un anciano, pero eso no impide que sea el mejor amigo de Totó, un apuesto joven italiano. Se conocen desde hace mucho tiempo, cuando Alfredo era el encargado de proyectar las películas en el único cine del pueblo y Totó era un travieso niño que soñaba con ser algún día Gary Cooper o James Stewart. Un accidente deja ciego a Alfredo, pero eso aumenta su capacidad para seguir viendo con el corazón. Ver que Totó puede ser alguien importante en el mundo del cine, pero que si se queda en ese pueblo, no podrá ser una estrella que brille con luz propia. Por eso le pide al muchacho que se vaya de esa villa, que huya y no vuelva más, que "no le quiere oír hablar más a él, sino que quiere oír hablar de él". He reconocido muchas veces que esta película, Cinema Paradiso, es de las que me tocan la fibra sensible porque es un ejercicio de "metacine" asombroso. Un prodigio de amor al séptimo arte, de cómo contar una vida a través de las películas, de como el cine consigue unir a dos generaciones tan separadas en el tiempo, en una historia preciosa y con un personaje, Alfredo, que es de los más entrañables y carismáticos de la historia del celuloide.

Me cuesta elegir una escena de la película, porque me gustan todas, desde la inicial hasta el final, pero me quedo con la despedida de Totó. La secuencia se inicia con un diálogo en el que Alfredo le plantea a Totó que si quiere hacerse una figura del cine, y conseguir su sueño, debe salir de ahí, mirar hacia delante y no volver, no dejarse llevar por la nostalgia, porque si vuelve, habrá fracasado. Acto seguido nos intercalan dos escenas: en una, el joven Totó reflexiona sobre las palabras de Alfredo en mitad de la oscuridad mientras la cámara, en un movimiento sensacional, nos acerca a él para sentir lo que él siente en ese momento. A continuación la imagen se funde con otra de Totó ya mayor, convertido en un importante y famosísimo director, recordando aquel momento, y dejando traslucir que si ha cumplido su sueño, es gracias a aquel hombre que conoció de niño. La secuencia acaba con el Totó de joven, en la estación, despidiéndose de su familia, pero donde solo vemos los abrazos mediante una sucesión de planos abruptos. Tras despedirse de Alfredo de manera emotiva, se monta en el tren, y asomado por la ventanilla, recorre con la mirada los paisajes y caras de la gente que nunca más va a volver a ver.



viernes, 12 de junio de 2009

Escenas de cine

Como ya dije en posts anteriores, pasaba por mi cabeza hacer un apartado de estas características, es decir de comentario de escenas de cine. En primer lugar iba a ser solo de El Padrino, que da para hablar muchísimo, pero pensándolo mejor, nos vamos a abrir, y serán escenas de cine en general. No necesariamente van a ser aquellas más famosas, sino las más representativas de algún momento de una película, las más impactantes, o sencillamente las que más me gustan a mí que para eso soy el que escribe. Tengo dudas de cuál será la primera secuencia a analizar, así que me tomaré un momento para pensar, y en el siguiente post, inauguramos. Vamos, que empezamos.

martes, 9 de junio de 2009

Que sí, que sí...

Que estoy aquí, que no me he ido ni abandonado este blog, pero cuestiones principalmente laborales, me han impedido actualizar estos días este cuaderno. Además aprovecho para anunciar nuevo apartado en el blog...

miércoles, 3 de junio de 2009

Viva er Betis "manque" pierda... siempre

Tras unos días de reflexión y a instancias de don Prognato, me decido a escribir sobre el descenso del Betis. No soy un taliban del fútbol, si pierde mi equipo no lloro y solo suelo exaltarme ante grandes partidos o cuando juega la selección española. Pero hay cosas que duelen, como es el ver a gente adulta, ancianos y niños llorando a lágrima viva porque el equipo de su (mi) alma ha bajado. El fútbol es una vía de escape a los problemas diarios, una forma de entretenimiento, de disfrutar viendo un deporte, pero hay equipos que para su afición son mucho más. Y eso es el Betis. Un sentimiento, una forma de entender el fútbol, la alegría de pertenecer a un equipo con solera, con 102 años de historia. Y la gente llora porque siente que le han robado ese sentimiento, que le han robado esa forma de entender el fútbol, que le han robado esa alegría de ir al Benito Villamarín a disfrutar de su equipo, que le han robado el cariño y simpatía que el equipo despertaba en toda España en esos más de cien años de historia.

Y ese "ladrón" tiene un nombre: Ruiz de Lopera. Sé que es muy fácil criticar al presidente de una entidad cuando las cosas están tan mal, pero en este caso, aún no siendo el único responsable, si es el máximo culpable de esta debacle. Lopera vive en su burbuja, aislado de la gente de la calle, sin oír a nadie, haciendo del Betis un club presidencialista, anclado en el pasado, con unas estructuras endeblísimas, podridas, añejas, sin ninguna importancia de cara a la planificación del club, porque todo depende de lo que Lopera quiera. Para la gente que no es del Betis Lopera es un tipo que hace mucha gracia, rozando a veces el ridículo, que representa todo aquello por lo que los andaluces no nos sentimos representados, ese aire de señorito gracioso y caprichoso, prepotente, vendemotos y que identifica su persona con el Betis. Y eso no es así. El Betis es mucho más que este tipo, que en su momento fue salvador de la entidad, pero hace ya muchos años que es su gran destructor. Enfrentamientos absurdos con el Sevilla, la tontería de pasear la copa del Rey por toda Andalucía, poner su busto al lado de Del Nido en un partido, y dos descensos de un equipo con la cuarta masa social de España.

El problema está que el Betis es de Lopera. Es su dueño, y si alguien quiere echarlo, debe pagar lo que él pida. Es muy fácil criticar sus actitudes y no hacer nada, pero la cosa está como está. Y bueno, luego está el tema de los futbolistas. 35 millones de euros invertidos en jugadores que no han demostrado ni la mitad de la mitad de lo que se les presuponía. Con un aire desganado, con un divorcio total con la afición y ganando solo cuatro partidos de 19 en el Villamarín. Una plantilla sobrevalorada, con jugadores que están ya de vuelta de todo y con gente joven que no despunta como debiera hacerlo. Pero tampoco hay que verlo todo negro. Se dice que en el mismo momento que se desciende se empieza a ascender de nuevo. Quizás esto venga bien, se renueven los aires, entre gente con ganas, canteranos con ilusión, gente válida que haya en el equipo, y sobre todo, una estructura deportiva con un director general y un entrenador (por favor Serra Ferrer vuelve) con las suficientes ganas de devolver al Betis al lugar que le pertenece en el fútbol.

martes, 2 de junio de 2009

E.T II


Ministro de Transporte de EE.UU.: Pepiñouu, perou que esh esouuu.

José Blanco: Miii caaaaasa.