miércoles, 19 de noviembre de 2008

¡Se rifan tetas, oiga!

Posted on 19.11.08 by Rafael Huete

Sinceramente creo que estamos en unos tiempos surrealistas. Decía el personaje de Woody Allen en su película "Sombras y Niebla", ante una situación de acontecimientos disparatados, que un amigo suyo tenía la convicción que todo en la vida real formaba parte del sueño de un perro, y viendo algunas cosas, al final me aliaré con el amigo de Allen. La última locura, chifladura, memez... no sé como calificarlo, es que una discoteca de Valencia sortea un aumento de pecho a las señoritas que vayan a la fiesta "Homenaje de la mujer", algo del todo contradictorio y llamativo. Aunque para llamativo es que todas estas asociaciones de feministas y feminatas que protestan cuando se proyecta una película en la que Cary Grant da una torta a su parternaire de turno, ante esta aberración de la dignidad de una mujer no abran el pico.


El director de la discoteca dice que entiende que se ponga el grito en el cielo debido a la "hipocresía social que existe" y que la idea está copiada de una iniciativa argentina llamada "Quiero mis lolas". Además este caballero se descuelga con la siguiente afirmación "las mujeres que critican el sorteo son las que ya no tienen arreglo. Sólo hay que verles la cara". Toma ya, encima el mamario sorteador se pone chulito. Si una mujer se muestra en contra de las operaciones estéticas (como yo) y le parece aberrante y deleznable que se rife un aumento de tetas, es porque es tan fea que ni el Pepe Gotera y Otilio de los bisturís de turno puede hacerle un arreglo. Seamos un poco serios por favor. Una operación siempre es algo delicado como para que una discoteca banalice con este tema.


Y como en eso que dice el director de la discoteca de la hipocresía social estoy de acuerdo, ahora que acabo de escribir esto, voy a ver si me toca el alargamiento de pene que sortea la charcutería Hermanos Sanz.