martes, 25 de marzo de 2008

Parece que no nos queremos dar cuenta

Posted on 25.3.08 by Rafael Huete

Año: 2008.
Lugar: China-Tíbet.
Problema: Los tibetanos, hartos de estar sometidos desde 1950 por China, deciden levantarse y reclamar su independencia. Los movimientos de protesta se solventan con una represión brutal de los chinos, mandando ejército y policía a la capital tibetana de Lhasa. El gobierno chino prohíbe a la prensa internacional informar de lo que ocurre. Es el país con más periodistas encarcelados.
Postura de la comunidad internacional y organismos mundiales: No hacer nada.




Año: 2008.
Lugar: Serbia-Kosovo.
Problema: Kosovo, parte fundacional de lo que hoy conocemos como Serbia, con menos de 2,5 millones de habitantes y sin apenas fuentes de ingresos, decide de forma unilateral proclamar su independencia de la antigua Yugoslavia.
Postura de la comunidad internacional y organismos mundiales: No hacer nada.


Año: 2008.
Lugar: Rusia.
Problema: La semana pasada aparecen dos periodistas, críticos con el gobierno, asesinados. Desde la llegada de Putin al poder han muerto 24 periodistas. Ninguno de los casos ha sido investigado ni resuelto.
Postura de la comunidad internacional y organismos mundiales: No hacer nada.



Son solo tres los casos que cito porque son noticias recientes de estas semanas, pero podría hablar de muchos más. Que China somete a los tibetanos y reprime con disparos las marchas pacíficas de los monjes, no pasa nada. China es actualmente considerada una potencia, un país emergente y no interesa dejarle las cosas claras respecto al Tíbet. Que Kosovo decide independizarse de Yugoslavia porque le viene en gana, no pasa nada. Interesa tener tranquila la zona, mantener las tropas de la OTAN allí (incluidas españolas) y así tener un aliado en un lugar complicado. Que Rusia se pasa por el forro de sus caprichos las resoluciones de Derechos Humanos y Civiles, asesinan a periodistas críticos con Putin como Anna Politkoskaya y no se investiga lo ocurrido. No pasa nada, hay que entender a Rusia, es una potencia mundial (o más bien lo fue) y no hay que enfadar a Putin.



Son tres casos de hipocresía y de complacencia de la comunidad internacional con la vulneración de derechos elementales. Países como EE.UU, Francia, Gran Bretaña, que son de los más importantes, no hacen nada, y si lo hacen, como en el caso de Francia con China, la solución es boicotear la jornada inaugural de los JJ.OO. O reconocer a Kosovo porque es un país con una situación estratégica clave y con salida al mar. Soluciones peregrinas y bobas que ni mucho menos solventan los auténticos y gravísimos problemas de los que estamos hablando. Hace falta una profunda concienciación, porque lo que está ocurriendo, aunque se quiera medio tapar, es muy grave.
P.D: Hoy nos hemos enterado de la muerte de un genio español (cosa que desgraciadamente no abunda). Rafael Azcona nos ha dejado. El próximo post, dedicado a él.

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